La mexicana y El güero, la primera telenovela producida 100% en pandemia

Nicandro Díaz González, productor de La mexicana y El güero, detalla a ttvnews cómo son las grabaciones de la primera novela grabada en pandemia y que debuta el 17 de agosto por Las estrellas.

La telenovela La mexicana y El güero quedará en la historia como la primera ficción de Televisa rodada y estrenada al aire en plena pandemia del Covid-19.

Es que la ficción, que verá aire el próximo 17 de agosto por Las Estrellas en México, ha sido la primera en filmarse con los protocolos de seguridad y sanidad de Televisa.

En diálogo con ttvnews, Nicandro Díaz González, productor de La mexicana y El güero, comparte detalles de cómo está siendo el trabajo de producción y realización de esta comedia romántica.

¿Qué expectativas tiene para el debut de La mexicana y El güero?

El grupo está muy motivado. Son más de 30 actores fijos durante toda la historia, que es coral.

¿De qué trata?

Versa de un estadounidense que su madre en el lecho de muerte le dice que, como es adoptado, busque a su familia real en México. Paralelamente, le tienden una trampa para hacerle un fraude. Le presentan a sus supuestos hermanos y conoce a su supuesta familia. El problema viene cuando se empieza a enamorar de su supuesta hermana -que es Itatí Cantoral- y ella de él; pero no le puede decir la verdad. La historia se presta a una serie de enredos.

¿Cuál es el tono de esta novela?

Es una comedia, pero también tiene melodrama. Es un producto 100% familiar, pero no por eso deja de tocar ciertos temas serios, como el vientre subrogado, por ejemplo. Pero la idea principal es de entretener.

¿Qué desafíos implica grabar con protocolos de seguridad sanitaria?

De por sí en las producciones siempre estamos al filo de la navaja. Sin embargo, la pandemia rebasa todo lo que cualquiera de nosotros pudo haber imaginado. Porque hemos tenido gente del equipo de producción y caracterización que se ha contagiado. Uno está consciente que en cualquier momento puede pasar cualquier cosa. La idea principal es cuidarnos. Y tenemos una serie de protocolos establecidos por la empresa que son parte de los protocolos de nivel internacional.

Creo que en las grabaciones estamos más cuidados que nadie. Sin embargo, el estar siempre con el tapaboca en el foro o las locaciones -respirando nuestro propio dióxido de carbono- resulta fastidioso.

La época es difícil. Tomamos ese riesgo. Es un reto importante. Esperamos terminarlo. También sabemos que la probabilidad de contagio es muy alta porque aquí en México los contagios siguen subiendo de manera exponencial. Todos tenemos esta conciencia, pero no podemos evitar la circunstancia mundial y del propio país, que es por demás complicada.

¿Fue necesario reescribir parte de los libretos?

Algunas pequeñas cosas, porque hubo locaciones que teníamos y que ya no tuvimos acceso, entonces se tuvieron que readecuar a interiores. Es no significa que en la historia tratemos cosas del Covid, ya la realidad es muy dura como para que nosotros la estemos machacando en el contenido.

De todas maneras, ¿considera que esta realidad impactará en las narrativas?

Quizá haya alguna que sí. Las historias de carácter más realista. Pero en una toma en televisión, un close up debe de reflejar determinada emoción y, ¿qué emoción puedo proyectar con un tapaboca? Es una limitación para la proyección de las emociones. En ese sentido es complicado. No creo que sea lo que motive a los productores a hacer sus realizaciones. Quizá cuando esto pase se haga una situación que trate esto, pero no creo que en paralelo.

¿Cómo se han adaptado los talentos a esta modalidad?

Se han adaptado porque son gente muy profesional. Tenemos medidas muy estrictas. Por ejemplo, le hacemos exámenes de Covid a los actores antes de las escenas de besos y eso les da la confianza sin necesidad de que se estresen por un posible contagio. La gente del plató está protegida todo el tiempo. Los actores también, menos a la hora de grabar las escenas. Se convierte en un problema porque les queda marcado el tapaboca por el maquillaje. Pero así nos tocó y como dije alguna vez: las producciones se tienen que adaptar a los cambios, y si nos tocó vivir esto, hay que hacerlo. Somos la primera telenovela que de principio a fin será hecha en estos tiempos.

¿Cuántas horas de rodaje por día?

Normalmente de 9:00 de la mañana a 9:00 de la noche, aunque hay jornadas a veces que son más pesadas, sobre todo cuando es en locación.

¿Ya se está trabajando en la edición?

Justamente ya nos toca ver el primer capítulo armado. Eso nos tiene ilusionados. Habrá que hacerle los ajustes…

¿Cuántos episodios?

Son 122 episodios trasmitidos de lunes a viernes.

¿Cuál es el plan de rodaje para finalizar el proyecto?

Pensamos que podemos estar terminando en la primera o quizá segunda semana de enero. Todavía queda mucho camino por recorrer. Por eso digo que es de alto riesgo, con todo lo que falta… En algún momento nos puede alcanzar al talento. Porque si nos pasa a los que estamos atrás, alguien puede ocupar el lugar, pero con ellos ya lo puede sentir el producto y la gente.

¿Ya está trabajando en otros proyectos?

Estoy evaluando otros, pero todavía no hay nada cerrado. Ahora nos está tocando la fortuna de revivir proyectos del pasado, porque Amores verdaderos, una historia argentina de [Enrique] Estevanez, fue repetido con mucho éxito en Las Estrellas. Luego Destilando amor y ahora Soy tu dueña.

Estamos chequeando otra historia que es chilena y que aparentemente tiene muchas bondades, pero ahora estamos enfocados en La mexicana y El güero. Luego veremos.

Bitnami