La edad de oro de la ficción televisiva vive un inesperado parón en plena crisis del Covid-19. Cientos de rodajes suspendidos, eventos cancelados y establecimientos cerrados obligan al sector a pedir ayuda y a comenzar a replantearse los modos de hacer.

En una semana en que no existe otro tema posible de conversación que la pandemia del coronavirus, la industria audiovisual no es ajena a una crisis cuyos verdaderos efectos y daños resultan todavía inciertos, a medida que el «lockdown» afecta a cada vez más países.

Esta situación sin precedentes está provocando la suspensión de eventos y citas, la interrupción de rodajes de series y películas, el cierre de salas de cine y por ende la cancelación de estrenos, lo que afectará a calendarios, flujo de capital, empleo y quién sabe cuánto más.

Rodajes suspendidos

Del conjunto de la industria televisiva, las productoras seguramente estén siendo las primeras perjudicadas en todo este fenómeno.

En España, el Sindicato Técnicos Audiovisual y Cine – TACEE publicó una lista del estado de las producciones en curso de series y películas. Al pasado viernes 13 de marzo, la situación afectaba a los siguientes proyectos:

Con la puesta en vigor, este lunes 16 de marzo, del decreto de Estado de Alarma para todo el territorio español, más de 25 series en rodaje se encuentran paradas.

La suspensión afecta a todas las principales cadenas y plataformas: Netflix (Élite, Hache, In From The Cold, El inocente, El vecino, Sky Rojo), Amazon Prime Video (El Cid, El internado, 3 caminos), Movistar (Hierro, Paraíso, Skam, Merlí Sapere Aude), RTVE (Acacias 38, Al pilón, Hit, Mercado Central, La caza. Tramuntana, Servir y proteger), Atresmedia (Amar es para siempre, Veneno) y Mediaset (La que se avecina, Señoras del (h)AMPA).

La lista incluye otros títulos en rodaje en España, como The Mallorca Files de la BBC y Glow & Darkness, sin pantalla.

Netflix, además, anunció la cancelación de sus producciones en EEUU y Canadá. Y este lunes, The Witcher ha sido la primera gran producción del Reino Unido en ser suspendida, por al menos dos semanas.

La BBC comunicó lo mismo para las sextas temporadas de Peaky Blinders y Line of Duty. Y Amazon, para Lord of the Rings.

En EEUU, el Covid-19 frenó las grabaciones de series como Atlanta, Batwoman, Bull, Carnival Row, Chicago Fire, Dinasty, Fargo, FBI, For All Mankind, Grace and Frankie, Grey’s Anatomy, New Amsterdam, Queen, Riverdale, See, Servant, Snowfall, Stranger Things, Supergirl, The Crown, The Good Fight, The Morning Show y Young Sheldon, entre muchas otras.

Prueba de fuego para los eventos

Enumerar los eventos y encuentros vinculados a la TV cancelados resulta ya una tarea difícil.

Desde grandes citas como Miptv, Series Mania, LA Screenings, los Upfronts de NY o el SXSW, hasta presentaciones regionales de compañías y lanzamientos de producciones, todo está en pausa hasta, al menos, el mes de junio.

Al margen del impacto económico que este parón tendrá en el sector, la situación ya está invitando a buscar soluciones alternativas y a repensar un modus operandi que parecía inamovible.

«La industria de la televisión siempre ha estado, y probablemente seguirá estando, muy dirigida por las relaciones personales. Pero no hay duda de que muchas empresas comenzarán a notar los beneficios y la rentabilidad de las formas de comunicación alternativas, principalmente digitales», opina Girts Licis, director de Estrategia de la consultora K7 Media.

«Como resultado, podríamos experimentar una mayor transformación en el mercado, en los eventos y en los acuerdos de lo que hubiéramos imaginado hace solo un par de meses», añade.

Plan de rescate en 10 puntos

En uno de los primeros movimientos colectivos en pos de pedir auxilio para buscar soluciones, el European Producers Club, con sede en París, ha iniciado un llamamiento a los gobiernos nacionales y a la Unión Europea para que implementen un plan de rescate, necesario para salvar la industria audiovisual europea de esta crisis.

El plan, de 10 puntos, se resume así:

Proyectos en distribución:

1. Establecer un esquema europeo y estatal para compensar a todas las partes afectadas por estrenos cancelados.

2. Mejorar el estreno de películas en plataformas digitales para que permita una compensación económica justa para los productores y distribuidores.

Proyectos en preproducción y producción:

3. Establecer fondos de emergencia nacionales que otorguen préstamos sin interés para cubrir costos.

4. Proporcionar garantías europeas y estatales para que las compañías de seguros reembolsen los reclamos por suspensión de la producción y cubran los riesgos relacionados con el coronavirus.

5. Que los financieros, cadenas y las plataformas liberen a los productores de los plazos contractuales y extendan la validez de sus decisiones financieras hasta que finalice el período de suspensión.

6. Que las autoridades retrasen los impuestos, la seguridad social y otros impuestos directos o indirectos relacionados tanto con el rodaje como con la productora.

Proyectos en desarrollo:

7. Organizarse para que los sistemas de financiación pública mantengan los negocios como de costumbre, sin interrupción, online si es necesario.

8. Alentar a las cadenas públicas y comerciales y a las plataformas OTT que disfrutan de nuestra creatividad audiovisual a continuar y aumentar las actividades de desarrollo.

9. Promover producciones de contenido valioso (positivo, educativo, de salud, optimista) en una variedad proporcional para ayudar a la audiencia a enfrentar el encierro y el estrés.

Sostenibilidad de las obras creativas:

10. Promover la adquisición por parte de las cadenas y plataformas de producciones de catálogo de todos los productores europeos con una compensación económica justa, para llenar los vacíos que generará el cierre de cines y de producciones combinado con el mayor consumo online.

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